¿Por qué mi institución educativa debe usar una tarjeta escolar?
Los objetivos de la tarjeta escolar varían según el tipo educativo y la institución. La tarjeta escolar o de estudiante se usa para uno o más de los siguientes propósitos:
- Identificación para exámenes/pruebas
- Autorización para acceder al edificio y utilizar las instalaciones de la escuela, como el acceso a una impresora, una máquina de café o una taquilla
- Pague servicios como café o té, impresión y fotocopiado
- Como carné de estudiante para obtener un descuento en las empresas
- Como método de identificación para hacer uso de instalaciones fuera de la escuela/universidad, como los gimnasios
Los 5 desafíos en la implementación de una tarjeta escolar
Desafío 1: Disponibilidad el primer día de clases
Este desafío existe principalmente en las escuelas secundarias, donde los estudiantes de primer año primero tienen que tener una fotografía tomada por un fotógrafo escolar. A veces, pasan varias semanas antes de que el alumno reciba esta foto de pasaporte, que luego se imprime en la tarjeta.
Desafío 2: Nuevas cartas para los recién llegados
La llegada de nuevos alumnos a mediados de año suele ser una carga adicional para el conserje y la administración de la escuela.
Desafío 3: ¡Ayuda, he perdido mi carné escolar!
Una breve encuesta realizada en una escuela del sur del país mostró que, durante su carrera escolar, los alumnos no tenían una tarjeta, sino a menudo tres, porque la perdían.
Desafío 4: olvidar el carné escolar
Un alumno que olvida su carné escolar suele suponer una carga para los demás alumnos y para la organización escolar, en particular para la recepción o el conserje. La pregunta es: «¿Me puedes prestar el tuyo?» o «¿Puedo entrar sin carné escolar?».
Desafío 5: la tecnología de tarjetas evoluciona rápidamente
La rápida evolución de las tecnologías de tarjetas significa que a menudo no se puede garantizar la seguridad de las tarjetas. Una desventaja permanente de la tecnología de tarjetas parece ser que la tarjeta, al igual que la tarjeta con chip para el transporte público, ya está descifrada incluso antes de fabricarse.
¿Cuál es la alternativa al carné escolar?
¿Hay buenas alternativas? A primera vista, una tarjeta escolar no se puede limpiar con un paño, volver a imprimir y volver a utilizar después de que un alumno se haya ido. La idea es muy circular, pero poco práctica. La solución más obvia, que tiene grandes ventajas, es, por supuesto, el uso del teléfono móvil. No cabe duda de que esta solución atrae a alumnos y estudiantes, ya que la protección del medio ambiente está en su ADN.
Pero el teléfono móvil tampoco es del todo convincente: en primer lugar, el consumo de energía de un móvil es una carga para el medio ambiente. En segundo lugar, para una escuela secundaria, el teléfono móvil no siempre es una buena opción. Muchas escuelas se centran en restringir o, a veces, incluso prohibir el uso del teléfono móvil.
Por último, una tarjeta escolar digital a través del teléfono móvil a menudo solo es adecuada para un propósito, a saber, la identificación. Cuando también hay que utilizar otros servicios, la aplicación de tarjetas escolares digitales ya no es suficiente. Por lo general, la próxima aplicación aparecerá pronto y, antes de que te des cuenta, tendrás muchas aplicaciones en tu teléfono. Es el mismo problema que antes con las tarjetas de plástico, que ahora he vinculado a una aplicación: Stocard. Ahora sigo buscando un Stocard para aplicaciones escolares.